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¿la masturbación puede causar prostatitis?



1st September, 2020

 



Hace ya muchos años, me topé con algunas investigaciones y artículos sobre la pornografía y la masturbación, y los efectos negativos que podría tener sobre los hombres y su salud. Lo encontré interesante, pero nunca pensé demasiado en dichas consecuencias. Luego, en algún momento cuando empecé a batallar con la prostatitis y el síndrome del dolor pélvico crónico volví a interesarme en este tema de nuevo.

Según muchos “especialistas”, la masturbación y / o los orgasmos no tienen ninguna consecuencia — y a veces dicen que es beneficioso — , pero cuando tenemos prostatitis y / o dolor pélvico crónico y tenemos excesos sexuales, estamos causando que el piso pélvico ya de por sí apretado y doloroso se contraiga más debido a que el hombre está forzando los músculos de alrededor de la pelvis. Cuando la frecuencia y el nivel de contracción intensa de estos músculos se mantiene más allá de cierto punto, se puede desencadenar el dolor pélvico crónico, o cómo le llaman los urólogos: LA PROSTATITIS. Si el síndrome ya está presente, la actividad sexual compulsiva a menudo empeorará los síntomas.

Un claro ejemplo de todo esto, es el ex Presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy. Es muy sabido que sufrió prostatitis toda su vida adulta debido a sus intensos excesos sexuales. JFK era un hombre mujeriego, y además, muchas de sus novias y amantes mencionaron su deseo insaciable por el sexo compulsivo.

TABLA DE CONTENIDOS

  • 1. EL ORGASMO COMO ESPAMO DE PLACER
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  • 2. DIETA PORNO / MASTURBACIÓN
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  • 3. CÓMO DEJAR EL PORNO Y HACER LA DIETA DE LA MASTURBACIÓN
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  • 4. MI ACTUAL RELACIÓN CON LA MASTURBACIÓN
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  • 5. ESTOY CASADO / TENGO PAREJA

    EL ORGASMO COMO ESPASMO DE PLACER

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  • ¿Por qué vuelven los síntomas de la prostatitis horas después o el día después de la eyaculación en hombres con prostatitis?

    Hay algo de debemos dejar claro aquí de manera tajante, el orgasmo es un espasmo de placer. El espasmo de placer del orgasmo da forma a una mayor serie de contracciones en la zona de la pelvis, y no en la próstata como tal, como lo indican los urólogos. Durante este, tensarás aún más los músculos pélvicos. Este aumento de la tensión contrae temporalmente un área ya contraída que no se relaja bien y tiende a acrecentar los síntomas como el dolor o la sensación de no poder orinar. Después de un tiempo, los músculos se relajan y vuelven a la subjetiva normalidad (que incluye cierto grado de dolor o incomodidad cuando una persona tiene síndrome de dolor pélvico crónico o prostatitis). Por esta razón, no recomiendo aumentar la actividad sexual o la masturbación cuando una persona tiene un aumento pronunciado de los síntomas de la prostatitis después del orgasmo.

    Es muy importante mencionar que en un principio, el orgasmo muy frecuente puede desaparecer los síntomas de la prostatitis debido a que este provoca un aumento de la dopamina y la serotonina — las hormonas del placer y la felicidad respectivamente — en el corto plazo. Los síntomas de la prostatitis desaparecen momentáneamente durante el orgasmo, pero la desaparición del dolor después de concluir es casi siempre de corta duración. Cuando el malestar psicológico vuelve a presentarse, surge la necesidad de sentirse mejor a través del orgasmo, y entonces se produce de nuevo la masturbación o la búsqueda de la eyaculación convirtiéndose en un círculo vicioso. Es así que esto puede calmar momentáneamente el dolor, la ansiedad o la depresión. Y es así como el deseo de sentirse mejor en alguien que se masturba de forma compulsiva se reafirma y repite, sin mencionar que la masturbación produce menos placer que el sexo y crea más actividad física y malestar psicológico.
     

        Algo a considerar antes de meter la mano a tu pantalón

    Además, de lo mencionado con anterioridad, es muy común que los orgasmos repetidos en estrecha proximidad produzcan niveles decrecientes de placer. Es decir, la quinta puñeta / paja en el día ya no va a ser tan placentera como la primera. Lo mismo sucede con la ansiedad. La disminución del placer con orgasmos frecuentes también produce un alivio decreciente de la ansiedad y la depresión.

    No puedo dejar de repetir cuan importante es que la experiencia de la eyaculación generalmente reduce el dolor la ansiedad e incomodidad por un breve periodo de tiempo, pero a menudo creará más molestias o dolor horas después o al siguiente día. Cuando el tratamiento de recuperación es efectivo, a medida que los síntomas se calman, la frecuencia de la actividad sexual puede volver a la normalidad.

    Muchos urólogos recomiendan masturbarse y tener sexo con frecuencia, pero la recompensa de la masturbación, más allá de ayudar a reducir o detener los síntomas del dolor pélvico en el largo plazo, perjudica. Es el placer rutinario y profundo de la relajación profunda el que debemos buscar. Es decir, buscar sentirse bien con la interacción social, la amistad, las actividades creativas, el ejercicio y otras actividades que aportan sentido y calidad a la vida también son necesarias para reemplazar lo que se busca por el efecto de la actividad sexual compulsiva.

    Entonces, una vez que puedas satisfacer tus necesidades psicológicas con una variedad de fuentes saludables en tu vida (vida familiar saludable, vida social, vida profesional, etc.) y los síntomas se hayan ido, entonces podrás buscar el placer de un orgasmo desde un lugar de poder y abundancia (sexo con tu pareja) y no de un lugar de necesidad y desesperación (masturbación).

    Y así es como mientras la sexualidad es absolutamente una función fisiológica, y de alguna manera no es diferente de comer o defecar, la evolución ha entrelazado nuestro deseo sexual (nota: un impulso, no una necesidad) con nuestras necesidades psicológicas de estima y conexión. Están íntimamente vinculados, y no se pueden desvincular. Incluso si uno logra suprimir esas necesidades, regresan en formas de necesidad y compensación excesiva. Es por eso que el uso excesivo de la masturbación te hace sentir como un perdedor, porque mientras lo haces, solo te recuerdas a ti mismo que no eres lo suficientemente bueno (estima) para ser amado por una mujer hermosa (conexión). Es por eso que la gran mayoría de los hombres no gastan todo su dinero en prostitutas, pero sí en tener cita tras cita con mujeres normales.

     

      Como te sientes después de haber metido la mano a tu pantalón

    Pero como mencioné antes, la masturbación no solo causa problemas de dolor pélvico y prostatitis, también ocasiona problemas psicológicos como la ansiedad, lo que perjudica más tu dolor de forma indirecta.

    Muchos investigadores debaten si la adicción a la pornografía y la masturbación es o no una adicción real, pero la semántica no cambia el hecho de que muchas personas experimentan problemas con su salud y su psicología. Además afecta en áreas como parejas infelices e insatisfechas. Sin mencionar que distorsiona completamente tu percepción de lo que es la belleza y te da estándares irrazonables para tener sexo con las mujeres que conoces.

    A menudo, los hombres con depresión y ansiedad que no están en una relación amorosa se masturban con frecuencia como una forma de reducir su ansiedad. Para otros hombres, el sexo es una de las únicas formas en que pueden recibir amor, afecto, cercanía y tranquilidad.

    Detener la adicción a la pornografía, la masturbación compulsiva, y reducir la cantidad de sexo puede ayudar a reducir la intensidad de los síntomas del dolor pélvico. Una vez dejada esta adicción, a menudo uno pasa por un síndrome de abstinencia a medida que se detiene la dependencia al orgasmo.

    Muchos hombres usan las compulsiones sexuales para cubrir sus necesidades psicológicas. Verás, todos los seres humanos tenemos necesidades psicológicas fundamentales. Si no satisfacemos nuestras necesidades psicológicas, sufrimos, a veces gravemente. Así como necesitamos comida, refugio y dormir para sobrevivir, también necesitamos satisfacer nuestras necesidades psicológicas para mantenernos mentalmente sanos y estables. La masturbación y la pornografía no figuran en esta lista.

    Los psicólogos han estudiado una serie de necesidades psicológicas, pero realmente se pueden reducir a cuatro necesidades fundamentales: seguridad, autoestima, autonomía y conexión. Para ser personas felices y estables, debemos satisfacer estas cuatro necesidades de manera constante. Si no estamos satisfaciendo estas, nuestra mente comenzará a racionalizar formas de satisfacerlas, incluso a expensas de nuestra salud física o mental. Y es aquí donde la compulsión sexual se hace presente.

    El porno, la masturbación y el sexo son una estrategia que usamos para satisfacer nuestras necesidades psicológicas y no una necesidad en sí.

    ¿Cómo sé esto? Porque no hay evidencia de que el celibato o la asexualidad sean física o psicológicamente perjudiciales. No hay consecuencias negativas por no tener suficientes orgasmos contrario a lo que muchos doctores recomiendan. Incluso se podría argumentar que NO masturbarse presenta beneficios psicológicos y para la salud.

    Ahora, no estoy sugiriendo que si lo haces seas una mala persona. De hecho, explorar nuestro cuerpo es genial. Las emociones que conlleva nuestra sexualidad y conocer nuestro propio cuerpo nos hacen personas más felices. Simplemente estoy señalando que no es una necesidad biológica / psicológica, sino simplemente otro impulso.

    La idea del sexo, el porno y la masturbación como estrategia para satisfacer necesidades psicológicas suena extraña para muchos hombres porque todo esto también es un impulso fisiológico, como comer, defecar o dormir. Pero a diferencia de estas, puedes pasar toda tu vida sin masturbarte o tener relaciones y no estar sufriendo por eso. El hecho es que los seres humanos, hemos evolucionado para relacionar de manera inconsciente la sexualidad con nuestras necesidades psicológicas más que con las físicas, cuando en realidad es al revés. Muchos hombres asumen que las personas están motivadas principalmente por el sexo, más que por sus necesidades psicológicas.

    Por otro lado, si las necesidades psicológicas no se satisfacen durante largos períodos de tiempo, nos pasarán factura física y psicológica. Las personas desarrollan neurosis, adicciones e incluso delirios para satisfacer sus necesidades.

    Las investigaciones muestran que el aislamiento social es más dañino que el alcoholismo o el tabaquismo. La depresión y el estrés están relacionados con todo tipo de problemas físicos terribles, pero nadie se ha suicidado nunca por estar demasiado cachondo / caliente. Lo hacen por falta de conexión o autoestima baja.
                         
     

    El primer bloque de La Pirámide de Maslow corresponde a                                     necesidades fisiológicas / biológicas. Los demás bloques corresponden a necesidades psicológicas.

                

    DIETA PORNO / MASTURBACIÓN


    Es posible que si tienes el Síndrome de Dolor Crónico Pélvico / Prostatitis seas adicto al porno y a la masturbación, y es muy probable que esto te haya afectado más de lo que crees. Piensa en la primera vez que viste porno. La mera imagen de una hermosa mujer desnuda probablemente fue demasiado para ti. Por desgracia, para muchos hombres con prostatitis y síndrome de dolor crónico pélvico al ver esto nuestros hábitos sexuales se volvieron más sucios, oscuros y retorcidos. Y lo peor de todo, cuanto más joven empezaste a ver pornografía, peor son todos estos efectos. Por lo tanto, propongo una dieta de pornografía y masturbación.

    El objetivo de la “dieta” es disminuir los síntomas que brinda la prostatitis y el síndrome de dolor pélvico crónico. Yo lo hice en el pasado cuando mis síntomas eran insoportables y funcionó para mí. A menudo dentro de dos semanas estos disminuyeron. Pero nunca había considerado conservarlo o convertirlo en un hábito permanente en mi vida. Recientemente, se popularizo la tendencia de no más porno y masturbación con el movimiento NO FAP, y varios hombres se unieron a esta tendencia y acordaron no mirar pornografía o masturbarse durante 1 año. En el foro al que pertenecía, muchos guardamos registros y resultó ser un gran éxito. Los excesos sexuales habían estado afectando negativamente nuestro síntomas de prostatitis. Para algunos, fue un cambio importante y muy difícil. Para otros, los cambios fueron menores y simples. Todos, parece ser que estuvimos contentos de haberlo hecho. Personalmente, había estado viendo pornografía desde que tenía 15 años, y lo había estado viendo casi a diario durante más de 10 años cuando comencé este desafío. Tenía ansias muy intensas de ver pornografía y masturbarme en las primeras semanas. Los antojos iban y venían, a menudo junto con mi deseo sexual. Algunos cambios de humor. Algunas noches soñaba con pornografía, no, no soñaba con tener sexo, soñaba con pornografía.

    Cuando no aguantaba las ansias de masturbarme, me propuse fantasear con chicas que conocía o había conocido, algo que ayudo la eliminación de pornografía. Otras veces no fantaseaba en absoluto. Un logro fue que NO fantaseé con el porno que había visto. Mi deseo sexual fue muy errático las primeras semanas. Algunos días estaba insoportablemente cachondo y luego estaba completamente desinteresado en tocarme durante unos días después de eso. A veces parecía que tenía 16 años de nuevo.

    Aunque alrededor de las dos semanas, mi deseo sexual era alto, mis síntomas de prostatitis disminuyeron, así como mi motivación para seguir el protocolo de no masturbación aumentó.

    Después de un mes, estaba claro que los síntomas estaban desapareciendo debido a esto, y debido a que estaba haciendo otras cosas de forma correcta. 

    En el segundo mes, no tuve tentación y los beneficios continuaron aumentando.
     

  • CÓMO DEJAR EL PORNO Y HACER LA DIETA DE LA MASTURBACIÓN


    Algunas personas, con un pequeño esfuerzo intencional, les resulta bastante fácil dejar de masturbarse. A otros les resulta fácil dejarlo al principio y luego de un tiempo batallan por evitarlo. Algunos lo encuentran totalmente imposible. Si crees que puedes sufrir adicción a la masturbación, ves pornografía por más de una hora en cada sesión, tienes problemas para tener una erección sin pornografía, o ves pornografía que no coincide con tu orientación sexual (ejemplo: lesbianas), entonces es hora de reiniciar por completo. La idea de reiniciar proviene de un sitio sobre cómo dejar el porno, YourBrainOnPorn.com. La esencia de la dieta es la siguiente:

    • Pon fin a toda la pornografía de inmediato empezando hoy. Elimina todo de tu computadora. También desecha todos los discos, revistas del conejito con las páginas pegajosas, Only Fans. Los impulsos más difíciles de controlar son los que tienen que ver con la tecnología. Si tienes problemas para controlar tus impulsos, descarga algún software gratuito de bloqueo de sitios web y bloquea todos los sitios de pornografía que conozcas indefinidamente.

    Esto puede sonar un poco extremo, y sé que todos piensan que deberían poder dejar este vicio sin usar bloqueadores de sitio porque, después de todo, no somos niños usando la computadora de nuestros padres, ¿verdad? Mira, lo entiendo, pero tu fuerza de voluntad es finita y tus hábitos y adicciones son, en última instancia, productos de tu entorno. Entonces, en lugar de utilizar toda tu energía para resistir la tentación a través de la fuerza de voluntad, tómate el tiempo para establecer un entorno que te prepare para el éxito. Algunas personas incluso evitan todas las imágenes por un tiempo porque puede ser difícil no ser atacado con imágenes carnosas en las redes sociales, anuncios, etc. Estos pueden ser desencadenantes para las personas que rápidamente conducen a antojos más intensos.

    • Limita tu masturbación a dos veces por semana tengas pareja o no. Escoge un día programado. Normalmente yo elijo el lunes y el jueves. ¡No te desvíes de tu horario de masturbación! Si deseas una dosis aún mayor de motivación para conocer mujeres (y quieres estar tan cachondo como un niño de 14 años), limita tu masturbación a una vez a la semana. Nuevamente, elije un día y mantente firme.

    • Cuando te masturbes, solo puedes fantasear con mujeres que has conocido y con las que no has tenido sexo. Podría ser esa mujer en el trabajo. Esa chica que conociste el sábado por la noche. La chica con la que tienes una cita esa semana, pero ella tiene que ser real (cuando digo real, me refiero a que no sea ninguna mujer del mundo del porno o aquellas zorras de Instagram), y tiene que ser alguien con quien no te hayas acostado (pero que obviamente quieras).

    • Cuando te masturbes, usa un lubricante. Hazlo más lento de lo usual. Toma más de 10 minutos si se puede. Toma tu tiempo.

    • Otra gran idea es que podrías considerar inscribirte a un foro de adictos a la masturbación / sexo. Ten algún tipo de apoyo donde puedas desahogarte. Sé que eso te hizo retorcerte un poco en tu silla, pero este es un problema increíblemente común para los hombres. Entonces, 1) no estás solo, y 2) está comprobado, básicamente, con cualquier tipo de comportamiento adictivo que el apoyo social aumenta en gran medida las posibilidades de éxito. Lo mejor de vivir en la era de Internet es que puedes hacerlo anónimamente en foros.

    • Cuando te masturbes, hazlo sin apretar tu pene, y a la vez tocando la zona del glande. Normalmente, cuando nos masturbamos solo recorremos con nuestra mano la zona donde comienza el pene hasta la zona abajo del glande, pero cuando tenemos sexo las paredes de la vagina sí tocan y estimulan el glande. Hay varios estudios que demuestran que el glande tiene tantas terminaciones nerviosas cómo el clítoris. Por lo tanto, estimularlo provoca una excitación mayor y hace que la sangre corra alrededor de la pelvis. También hay diversos estudios sobre la relación entre el flujo sanguíneo y la función muscular del cuerpo, en los que se menciona que a mayor flujo menos dolor crónico en la pelvis.

    Conclusión: Estimula tu glande con las yemas de tus dedos para que la sangre corra en la zona pélvica.






    • Y lo más importante, disfruta ese momento. No puedes hacer esto todos los días, ¿recuerdas? Sigue la dieta durante algunas semanas y esto tendrá repercusión en tus síntomas del Síndrome de Dolor Crónico Pélvico / Prostatitis, además te hará sentirte motivado para conocer mujeres, sin mencionar que las mujeres que aparecen en la pornografía dejarán de parecerte atractivas. Si recaes, empieza de nuevo. No seas duro contigo mismo. Idealmente, dentro de un mes podrás ver una mejora en tu salud pélvica, y la idea de salir para conocer mujeres será emocionante en lugar de sentirse como una tarea. Esto sirve. ¡Así que sal y hazlo!

    Yo sé que es más fácil decirlo que hacerlo, pero cree cuando te digo que tendrás tu recompensa a tu esfuerzo. He hablado con hombres que literalmente pasaron de tocarse 4 veces al día, entonces siguieron la dieta, y en un mes estaban conociendo mujeres y sus síntomas del Síndrome de Dolor Crónico Pélvico / Prostatitis tuvieron una leve mejoría.
     

     

    MI ACTUAL RELACIÓN CON LA MASTURBACIÓN


    En broma lo llamo una “recaída”, pero hace unos años estaba teniendo jornadas de trabajo de 14 horas y no salía mucho, así que busqué al viejo YouPorn para desahogarme. Sí, eso era desahogarse para mí. En mi regreso a la masturbación y al porno, un par de cosas habían cambiado: La pornografía que solía disfrutar ahora se sentía excesiva y yo me sentía culpable. Vi algunos videos en los que no podía creer las cosas que veía. No pude evitar notar lo infelices y poco auténticas que se veían las mujeres en los videos. También noté que algunas de las actrices obviamente estaban fingiendo sus orgasmos.


    Entonces, ¿qué significa esto? ¿La masturbación es cosa del diablo? ¿Nunca deberías hacerlo? ¿Está arruinando tu salud? Solo puedo responder por mí mismo. Para mí sí, la masturbación tuvo un impacto notable en mi salud y en mis síntomas, y sí, es mucho mejor que no lo haga de forma compulsiva. Por lo tanto decidí que nunca volveré a hacerlo regularmente. Es probable que lo haga ocasionalmente. Pero está claro que si lo hago de manera constante durante más de unos días, afectará negativamente mis síntomas otra vez. Sinceramente, desearía haber dejado este vicio hace años, ya que me habría ahorrado muchos problemas.

  • ESTOY CASADO / TENGO PAREJA


    Creo que ahora tenemos un escenario creíble para vincular el misterioso dolor post-eyaculatorio de la prostatitis crónica / síndrome de dolor pélvico crónico con algo que es el espasmo muscular. Cuando tenía prostatitis, hace años, descubrí que podía evitar mucho dolor post-eyaculatorio relajándome mientras llegaba al orgasmo, en lugar de la tendencia masculina natural de tensarse,  y ser una bestia en la cama. Esto ahora tiene perfecto sentido a la luz de los nuevos conocimientos. Al inhibir la respuesta de tensión, puedes inhibir la retroalimentación neural y la diafonía al pudendo y otras ramas nerviosas, evitando así la producción de neuropéptidos y mastocitos excitados.

    Con lo mencionado antes, se puede lograr una mejoría después de eyacular, pero si estás en una relación amorosa, lo mejor es reducir la frecuencia de la actividad sexual. Si el sexo duele, está bien ser menos sexual por un tiempo. Esto no afecta el sexo, solo se debe reducir su frecuencia hasta que uno pueda mejorar el aumento de la tensión en el piso pélvico después del orgasmo. Debido a que es importante reducir, pero no detener la actividad sexual para calmar los síntomas relacionados con el orgasmo, hay algunas sugerencias que pueden ser útiles:

    — Como ya dije muchas veces, pero quiero enfatizar: contrariamente al consejo común que algunos urólogos dan a los pacientes para aumentar la frecuencia de la eyaculación, creo que es más útil que los pacientes consideren reducir la frecuencia de la eyaculación hasta que la tensión del piso pélvico se afloje.

    — A veces es útil hacer estiramientos y liberar los puntos de activación antes y después del sexo. Algunos hombres me han informado que estiran suavemente su esfínter anal antes o después de la acción. Esto ayuda a detener y / o reducir tus síntomas posteriores al orgasmo. A menudo, es útil tomar un baño caliente, liberar el punto de activación interno con estiramientos y relajarse un poco después del sexo. A veces, la pareja del hombre en cuestión hará la liberación interna del punto gatillo como parte de su intimidad juntos.

    — Tomar 5 o 10 miligramos de Valium® o Tramadol® 50 o 100 miligramos antes o inmediatamente después del sexo. Aunque estos no son un afrodisíaco y no son un medicamento ideal para la actividad sexual. El objetivo de tomar estos es calmar el endurecimiento de los músculos, minimizar el dolor después de la actividad sexual y restaurar su capacidad de relajarse después del orgasmo. Esta estrategia se vuelve menos importante a medida que la pelvis vuelve a un estado más relajado en general.

    — A veces es útil sobar la piel, auto masajear o insertar un tejido puntiagudo (TheraWand®) enguantado y lubricado para desactivar los puntos de activación reactivados después del sexo en el ano.

    — Debemos buscar satisfacer nuestras necesidades psicológicas, por ejemplo, que un hombre intercambie masajes no sexuales con su esposa, o acepte acostarse en un sofá con su pareja e intercambiar un masaje en los pies por ejemplo. Estos momentos íntimos no sexuales sirven para abordar el aumento frecuente de la relación amorosa. Con esto no quiero decir que simplemente abrazar o complacer a la pareja, resuelva los problemas sexuales provocados por los síndromes de la prostatitis. Estas medidas son intentos para mejorar la relación.

    — Ciertos hombres acuerdan con su pareja que pueden darle placer sexual, pero ellos se abstendrán de tener el orgasmo. Este placer puede ser en forma de masaje sexual con los dedos, penetración sin orgasmo o cualquier forma de llevar a su pareja al orgasmo. Se creativo.

    — Relajarse durante la actividad sexual puede ayudar a calmar las molestias posteriores al orgasmo. He descubierto que completar la actividad sexual mientras los músculos pélvicos están relajados puede ayudar a reducir las molestias relacionadas con la actividad sexual.

    — La mejor posición es acostarse boca arriba y dejar que tu pareja se suba. Ya sabes, el cowboy. Una vez ahí, no tenses los glúteos o los músculos pélvicos o de los muslos durante el coito (difícil, pero se puede hacer)
    permitiendo que el orgasmo simplemente "suceda". Descubrirás que el dolor post-eyaculatorio disminuye significativamente.

       

     Seguir el protocolo ayuda, pero los orgasmos compulsivos pueden mermar nuestra mejora.

    A continuación, describiré algunos pasos que puedes seguir para cambiar el hábito a menudo inconsciente de tensar los músculos pélvicos antes y durante el orgasmo. La descripción son breves notas sobre la relajación relacionadas con la actividad sexual.

    1. Tomar conciencia de lo que sucede en los músculos pélvicos durante la actividad sexual.

    2. Observa si estás ansioso por anticipar ser sexual.

    3. Observa si hay alguna ansiedad que ocurra durante la actividad sexual.

    4. Observa si hay alguna sensación de urgencia al avanzar hacia el orgasmo o si hay una sensación de ocio al respecto.

    5. Observa si hay algún ajuste innecesario de tus músculos pélvicos a medida que se acumula la sensación sexual, a medida que te acercas al orgasmo o durante el orgasmo.

    6. Haz tu mejor esfuerzo para notar si agregas innecesariamente tensión a la experiencia de las sensaciones sexuales.

    7. Observa lo que sucede cuando practicas la intención de reducir voluntariamente tu tensión durante la actividad sexual.

    8. Observa si hay alguna diferencia en la calidad del orgasmo o en tu nivel de incomodidad después del orgasmo al reducir la velocidad y relajarte durante la actividad sexual.  
       
           

     Siguiendo el protocolo y no teniendo orgasmos compulsivos tenemos grandes                   oportunidades de mejorar 

    Muchos hombres han reportado beneficios de prestar atención a lo que realmente están haciendo con sus músculos pélvicos durante el sexo.

    Es importante considerar lo siguiente:

    Las instrucciones también se pueden usar para cambiar el hábito de apretar demasiado los músculos pélvicos durante la masturbación en caso de no resistir las ansias de hacerlo.

    Como hombres, estamos comúnmente capturados por el impulso de llegar al orgasmo. Este impulso suele ir acompañado de tensión pélvica e incomodidad. Mi recomendación es:

    No hacer que el sexo sea una actividad con prisa. Con esto quiero decir que alguien con dolor pélvico no debe tratar de llegar al orgasmo como si de una emergencia se tratase. Cuando un hombre tiene un alto nivel de tensión en sus músculos pélvicos, es común que se tensen durante las relaciones sexuales. La ansiedad por el rendimiento y “apresurarse” al clímax no es inusual.

    Cuando un hombre aprieta sus músculos pélvicos en un momento en que los músculos pélvicos se contraen naturalmente, a menudo hay una reducción en la sensación sexual y una mayor probabilidad de una mayor incomodidad después. Es por esta razón que brindo la idea de no hacer que el sexo sea una emergencia. Lo que esto significa en términos prácticos es que un hombre practique el método de relajación a lo largo de su experiencia sexual. Esto significa que se mantiene en contacto con su tendencia a menudo inconsciente de relajarse. Esta práctica de relajación durante el sexo es un territorio desconocido para la mayoría de los hombres. Hacer esto requiere ser más receptivo que activo. Significa que la ansiedad no está en el asiento del conductor durante el acto sexual. La relajación durante el sexo tiende a ir acompañada de un mayor nivel de sensibilidad física y emocional.

    Tener sexo, mientras estás profundamente relajado, no es una idea nueva. Esta filosofía ha existido durante miles de años y existe hoy en la práctica de lo que se llama ‘yoga tántrico’. Este tiene objetivos espirituales, nuestro propósito al discutir esta práctica es ayudar a restaurar la salud de los músculos pélvicos. 

    Aprender a relajarse profundamente mientras se tienen relaciones sexuales requiere tiempo, paciencia y perseverancia. Además de reducir los síntomas, esta práctica tiene otras recompensas de mayor presencia, intimidad y placer.

    El objetivo de todas estas estrategias es calmar el endurecimiento de los músculos después de la actividad sexual y restaurar su capacidad de relajarse después del orgasmo. Estas estrategias se vuelven menos importantes a medida que la pelvis vuelve a un estado más relajado en general.

    Cuando los hombres tienen algún tipo de síndrome de dolor pélvico crónico, hay muchas cargas emocionales que deben soportar que no se discuten. No es raro que algunos de los hombres con prostatitis tengan la idea de que su masculinidad depende de su capacidad para tener relaciones sexuales y satisfacer a su pareja o satisfacerse a ellos mismo. De hecho, algunos cuando les sugiero que deberían tener menos sexo, pueden expresar molestias y preocupaciones sobre cómo su pareja reaccionará.

    La práctica del tantra permite que las parejas tengan relaciones sexuales con un mínimo de movimiento. También facilita que los hombres y las mujeres relajen el piso pélvico durante la intimidad sexual.

    En su práctica, se debe permanecer receptivo y abierto para sentir las sensaciones y emociones que surgen del contacto entre él y su pareja. A medida que el hombre permanece en este estado con su pareja, el orgasmo puede venir sin el movimiento vigoroso que generalmente acompaña a las relaciones sexuales. La mayoría de los hombres que practican esto informan una experiencia sexual mejor. Esto no solo es para hombres con problemas de prostatitis, muchas parejas que nunca han oído hablar del dolor pélvico hacen el sexo tántrico.

    La práctica tántrica requiere una buena disposición por parte del hombre para tolerar la sensación que proviene de no apresurarse a tener el orgasmo. Hay hombres que no están interesados en explorar esta práctica y sienten que es una intrusión en su independencia y libertad sexual porque creen que nadie les debe decir que deben hacer en sus alcobas. A otros les molesta tener que practicar tal nivel de control de impulsos.

    CONCLUSIÓN


    En un inicio, puede ser difícil, pero una vez que empiezas el aprendizaje y el bienestar serán exponenciales. Y si fallas, no te castigues. Muchos de nosotros batallamos por sentir empatía con nosotros mismos, o más bien, tener compasión por nosotros mismos.

    Establece tus propias pautas; establece reglas consciente para ti mismo, es decir, “La próxima vez que tenga sexo, seguiré estos pasos” o, “Cuando tenga dolor, tomaré Valium” por ejemplo.

    Y recuerda, se trata de necesidades emocionales y necesidades psicológicas. El sexo y la masturbación no son como comer o ir al baño. Porque a) no mueres sin ellos, y b) es inevitablemente una experiencia emocional cuando lo tienes. La naturaleza nos ha conectado inteligentemente de esta manera: poner nuestras necesidades psicológicas primero y luego usar nuestra sexualidad para satisfacerlas con el fin de engañarnos para que nos quedemos y nos cuidemos unos a otros. Claro, todavía podemos intentar obtener una pequeña suma adicional de vez en cuando.

    Y lo más importante, si llegases a fallar, no te azotes por esto. Nuevamente, muchos hombres tienen problemas con esto. Y por mucho, quiero decir que el 80% de los hombres probablemente han abusado al menos alguna vez cuando se trata de esto. Además, quiero enfatizar que no tengo problemas morales con esto y no me importa lo que hagas con tus genitales en la privacidad de tu hogar. Y si tienes una recaída en algún momento, no te preocupes demasiado. El punto no es llegar a la perfección, sino vivir con más intención y conciencia. El hecho de que tengas algunos momentos de debilidad no te convierte en un pervertido sucio que tiene el autocontrol de un niño de nueve años. Solo significa que eres humano.

    Pero eso es todo. No se trata de la pornografía; se trata de cómo nos sentimos acerca de nosotros mismos. Así es como lo hizo la naturaleza. Y no va a cambiar pronto.

    Entonces da un paso hacia tu nueva sexualidad. Luego otro. Luego otro. Entonces nunca mires atrás… o agarres tu pene.